La creadora Natalie Reynolds enfrenta duras críticas tras un reto en TikTok que puso en riesgo la vida de la mujer, que no sabía nadar, y debió ser rescatada por los bomberos
El caso que involucra a la influencer estadounidenseNatalie Reynolds cobró notoriedad cuando se difundió un video que generó preocupación y repudio en la comunidad digital. En la grabación de TikTok, Reynolds se acercó a una mujer en situación de calle en Austin, Texas, y le propuso participar en un reto que consistía en lanzarse a un lago local a cambio de 20 dólares.
Esta cantidad, resultaba especialmente significativa para la mujer por su situación de vulnerabilidad económica. Reynolds presentó la dinámica como parte de una supuesta “búsqueda del tesoro”, incentivando en más de una ocasión a la participante a llevar a cabo la prueba.

La situación se tornó crítica cuando la mujer, tras haberse arrojado desde la orilla al lago, comenzó a gritar pidiendo ayuda porque no sabía nadar. Frente al peligro inminente, fueron los bomberos quienes finalmente intervinieron para socorrerla y evitar un desenlace trágico.
Durante los momentos de angustia, Reynolds y su equipo optaron por abandonar precipitadamente el lugar, alejándose mientras reían por lo ocurrido. La gravedad del caso radicó no solo en el riesgo físico para la involucrada, sino en la exposición mediática y el aprovechamiento de una situación de precariedad para generar contenido digital.
Entre las principales críticas, usuarios y activistas alertaron sobre la responsabilidad ética de los creadores de contenido y la necesidad de proteger a grupos vulnerables de acciones humillantes o peligrosas difundidas por figuras públicas. Frente a la presión social y el señalamiento de violaciones a sus normativas comunitarias, TikTok decidió tomar cartas en el asunto.
La plataforma procedió a suspender la cuenta de Reynolds, medida que imposibilitó el acceso y la difusión de nuevos contenidos por parte de la creadora ante sus miles de seguidores.

La sanción fue interpretada como una respuesta a la publicación de contenidos que promovían la exposición al peligro físico, la manipulación de personas en situaciones sensibles y la falta de asistencia ante una emergencia. Este reto, impuesto sin importar la relevancia ni la cantidad de seguidores del canal, puso en primer plano el debate sobre los límites de la “broma” en redes sociales y el papel de las plataformas en la protección de sus usuarios.
Reacción de Natalie Reynolds y súplica para recuperar su cuenta
Tras conocerse la suspensión, Natalie Reynolds reaccionó de manera pública y visible. El 9 de junio se presentó directamente en las oficinas de TikTok para solicitar que su cuenta fuera restaurada. En imágenes que circularon en las redes, se puede apreciar a la joven en un estado de desesperación, llorando frente a las puertas cerradas del edificio y tratando de comunicarse telefónicamente con personal de la empresa.
“Esto es mi vida”, expresó, reflejando la importancia que su presencia en la plataforma tenía para ella y su comunidad.
Además de acudir personalmente, se defendió mediante un video dirigido a sus seguidores. Allí ofreció una versión alternativa de lo sucedido.
“He sido vetada de TikTok y estoy aquí para explicar la verdad sobre por qué me vetaron. Una creadora popular en esta aplicación está tan celosa de mí y de mis seguidores que deliberadamente intentó sabotear mi carrera en TikTok. He trabajado tan duro para crear contenido original para ustedes, y simplemente no puedo creer que esto me esté pasando, pero nunca me voy a rendir ni a desistir. Los quiero”, dijo.
